Planifique ahora para usar los acuerdos de gastos flexibles de salud en 2018; puede contribuir hasta $2,650

Aviso: Contenido Histórico


Este es un documento de archivo o histórico y puede no reflejar la ley, las políticas o los procedimientos actuales.

IR-2017-187SP, 15 de noviembre de 2017

WASHINGTON ― El Servicio de Impuestos Internos (IRS) recordó hoy a los empleados elegibles que ahora es el momento de comenzar a planificar para aprovechar al máximo el acuerdo de gastos flexibles de salud (FSA, por sus siglas en inglés) de su empleador durante 2018.

Las cuentas FSA brindan a los empleados una forma de usar sus dólares libres de impuestos para pagar los gastos médicos no cubiertos por otros planes de salud. Debido a que los empleados elegibles deben decidir cuánto contribuir a través de deducciones de nómina antes de que comience el año del plan, este otoño muchos empleadores ofrecen a sus empleados la opción de participar durante el año del plan 2018.

Los empleados interesados que deseen contribuir durante el nuevo año deben hacer esta elección nuevamente para el 2018, incluso si contribuyeron en el 2017. Las personas que trabajan por cuenta propia no son elegibles.

Un empleado que elige participar puede contribuir hasta $2,650 durante el año del plan 2018. Eso es un aumento de $50 en comparación con el 2017. Los montos aportados a este plan no están sujetos al impuesto federal, el impuesto del Seguro Social o el impuesto del Medicare. Si el plan lo permite, el empleador también puede contribuir a la cuenta FSA de un empleado.

A lo largo del año, los empleados pueden usar fondos para pagar los gastos médicos calificados no cubiertos por su plan de salud, incluyendo los copagos, deducibles y una variedad de productos y servicios médicos que van desde cuidado dental y de la vista hasta anteojos y prótesis auditivas. Los empleados interesados deben consultar con su empleador para obtener detalles acerca de los gastos elegibles y los procedimientos de reclamo.

Según la disposición de uso o pérdida, los empleados participantes a menudo deben incurrir en gastos elegibles para el final del año del plan, o perder cualquier cantidad no gastada. Pero bajo una regla especial, los empleadores pueden, si así lo desean, ofrecer a los empleados participantes más tiempo ya sea mediante la opción de traspaso o la opción del período de gracia.

Bajo la opción de traspaso, un empleado puede transferir hasta $500 de fondos no usados al siguiente año del plan; por ejemplo, un empleado con $500 de fondos no gastados a fines de 2018 aún tendría esos fondos disponibles para usar en 2019. Bajo el período de gracia, un empleado tiene hasta 2½ meses después del final del año del plan para incurrir en gastos elegibles, por ejemplo, 15 de marzo de 2019, para un año del plan que finaliza el 31 de diciembre de 2018. Los empleadores pueden ofrecer cualquiera de las opciones, pero no ambos, o ninguno en absolute.

Los empleadores no están obligados a ofrecer FSA. Consecuentemente, los empleados interesados deben consultar con su empleador para ver si ofrecen una cuenta FSA. Se puede encontrar más información acerca de la cuenta FSA en la Publicación 969, (en inglés) disponible en IRS.gov.